El gusto por viajar y conocer otros lugares, unido al placer que nos proporciona el vino y todo el universo que lo rodea, da como resultado un concepto fascinante y enormemente atractivo para todos aquellos que disfrutamos de ambos elementos por separado, y que en los últimos años se han fusionado dando lugar al turismo enológico o enoturismo.
Se trata de un fenómeno relativamente joven en nuestro país, pero enormemente consolidado en otras partes del mundo como los valles californianos, Burdeos, o el valle del Duero en Portugal. A pesar de ello es un sector de enorme crecimiento en España, y que año tras año aumenta su importancia, tal y como reflejan los 1,5 millones de personas que visitaron en 2008 alguna de las muchas bodegas españolas que forman ya parte de este mundo que es el enoturismo.
Y no es de extrañar que el turismo enológico se esté desarrollando tanto en España, ya que en sus dos componentes nuestro país es una potencia mundial. Somos el tercer país del mundo en número de turistas recibidos, y el mayor viñedo del planeta en superficie. Era por tanto lógico que la unión de ambos elementos diera como resultado una floreciente industria en torno al enoturismo.
Pero si bien la visita de bodegas y viñedos así como la degustación de sus vinos, es el eje central en torno al cual gira, el turismo enológico es mucho más, y va mucho más lejos. El arte, la arquitectura, la gastronomía, la salud o la belleza, son otros valores añadidos que aumentan aún si cabe el disfrute de este tipo de turismo, y que están íntimamente ligados a él. Son muchos los arquitectos de talla mundial que han dejado su sello en las bodegas españolas con construcciones que parecen fundirse con la tierra y con las viñas, algunos de tanto renombre como Norman Foster, Frank Gehry, o Zaha Hadid. La exquisita calidad de la gastronomía española y de sus vinos, está presente también en los magníficos restaurantes que encontramos en numerosas bodegas de nuestra geografía, sin olvidarnos como no de los numerosos beneficios que posee el vino, no sólo para la salud, sino como producto de belleza para los tratamientos de vinoterapia de los que podemos disfrutar en esas mismas bodegas.
Comer y Dormir entre Vinos y Viñedos nace con la voluntad de acercar a todos aquellos que disfrutan del placer de viajar y de beber vino, los más seleccionados y excepcionales rincones del enoturismo en España, si bien se irán ampliando los contenidos en posteriores ediciones, a fin de poder ofrecer el más completo y variado compendio de hoteles, restaurantes, museos y bodegas, que le permitan gozar y disfrutar del enoturismo tanto como lo hemos hecho nosotros escribiendo esta guía.